1.Promover la movilidad sostenible, el CARRIL BICI.

Algunos consejos para quienes se quieran sumar a la realidad de la nueva movilidad, no contaminante y mucho más respetuosa para el ciudadano:

  • Planificar la red de carriles bici para que tenga continuidad y no haya puntos críticos para la seguridad.
  • Equiparlo con bolardos de balizamiento en el principio,en el final y en cada interrupción. Estos bolardos tienen que ser rojo burdeos, totalmente flexibles para resistir posibles impactos sin suponer un riesgo para los ciclistas y equipado con dos bandas reflectantes para garantizar su visibilidad incluso de noche.
  • Separar el carril del tráfico rodado con elementos separadores reflectantes. Fabricados en plástico reciclado y pintados con un compuesto a base de pintura blanca y micro perlas reflectantes.

2.Incremento de las zonas de USO PEATONAL.

Con proyectos pioneros como el de la súper Isla del entorno del Mercat de Sant Antoni de Barcelona o la ocupación de pequeñas partes de la calzada en las esquinas del ensanche de esta misma ciudad con elementos de mobiliario urbano, la gente le va ganando terreno al coche. Convertir una calle en una zona de picnic, de juego o simplemente de reunión para los vecinos es posible con una acción tan simple como la instalación de unos bancos, unas mesas o unas jardineras.

 

3.Planificación de grandes PARQUES URBANOS.

Pensar en las personas es poner a su alcance zonas tranquilas donde pasear, practicar deporte o dejar jugar los niños, ajenos al ajetreo de la ciudad.

 

4.Instalación de equipamiento RESPONSABLE.

Si las calles carecen de los medios necesarios es muy difícil exigir ciertas conductas cívicas. La instalación de papeleras con cenicero, para acabar con las colillas al suelo es un buen ejemplo. O habilitar islas de recogida selectiva, con una papelera para cada residuo, otro. ¿cómo exigimos a la gente que separe los desechos en sus casas, si luego en las calles lo ponemos todo en la misma cesta?