Sustitución, programación y telecontrol con sensorización, las tres claves para consumir lo mínimo

En la actualidad, ciudades de todo el mundo trabajan para convertirse en localidades sostenibles y respetuosas con el medio ambiente, con el objetivo de ofrecer espacios más limpios y saludables para sus habitantes. Muchas de ellas ya han dado sus primeros pasos y, en consecuencia, han conseguido reducir considerablemente sus niveles de contaminación lumínica, y a su vez, ahorrar económicamente con solo tres pasos. 


Sustitución

Renovar fuentes lumínicas obsoletas por luminarias de última generación LED que se caracterizan por ofrecer una vida útil superior a las 100.000 horas y una eficiencia lumínica superior a los 140lm/W.


Hoy en día no se cuestiona la necesidad de ser eficientes en el consumo energético y, el caso de la iluminación urbana, no es una excepción. A pesar de ello, según cálculos publicados por la asociación de fabricantes de iluminación ANFALUM, en España solo un 65% del parque lumínico ha sido reemplazado por la luminaria LED. Si bien es cierto que desde 2013 la mejora de la tecnología de los LEDs ha ido acompañada de un crecimiento exponencial de su implantación, aún queda mucho camino por recorrer. 


Las mejoras que han sufrido las luminarias en los últimos tiempos, cuyos diseños ya se empiezan a consolidar, incrementan en mucho su eficiencia y fiabilidad, volviéndolas más funcionales tanto a efectos lumínicos como en cuanto a mantenimiento o instalación. A finales de 2014, las luminarias LED no eran sino meras adaptaciones de las antiguas farolas de vapor de sodio, con una funcionalidad y un potencial inferior respecto al que la nueva tecnología puede ofrecer. En la actualidad, las luminarias de última generación como la FUSION del Grupo BENITO NOVATILU están totalmente diseñadas para reflejar al máximo las prestaciones de los LEDs.

Con eficiencias demostradas superiores a los 140lm/W, la capacidad para generar cerca de 40.000lm y una gran variedad de ópticas de PMMA de alta transparencia, las luminarias FUSION no solo disponen de un alto rendimiento energético, sino que además aprovechan al máximo los lúmenes emitidos, sin pérdidas por reflexión y reproduciendo al milímetro las simulaciones lumínicas. 


Los estudios lumínicos los realizan los propios técnicos del Grupo, a fin de asegurar que la instalación se ajustará a las necesidades de cada entorno. Estas luminarias han evolucionado abandonando la estética de los primeros radiadores visibles, que se llenaban rápidamente de suciedad, y han adoptado nuevas formas cuyo objetivo no es otro que el de maximizar la capacidad de disipación térmica, sin incrementar el volumen ni perjudicar a los equipos que deben trabajar a baja temperatura. Como máximo exponente de esta tendencia encontramos el diseño de la luminaria FUSION, configurada a base de una doble cavidad totalmente diferenciada térmicamente, con un espacio para los LEDs y otro para los equipos, y un radiador interno integrado en las dos crestas laterales que incrementa la capacidad de disipación en un 33% sin aumentar apenas el volumen del producto. Gracias a esta innovadora forma, la luminaria goza de una gran fiabilidad, con una vida útil de condiciones normales.

Programación

Si los patrones de comportamiento urbano nos indican que las necesidades lumínicas cambian en función de la hora, ¿por qué no las adaptamos, consumiendo menos cuando los requerimientos lo permitan?


En esta filosofía se basan los técnicos del Grupo BENITO NOVATILU cuando deciden que todas sus luminarias incorporen de serie un driver programable de cinco niveles con el que el ahorro se va a maximizar, pasando del 62% al 75%, si se aplica, por ejemplo, la curva de reducción óptima que la compañía ofrece como solución estándar y que baja el flujo lumínico hasta el 50% en las horas de menos afluencia. 


Telecontrol con sensorización


Zonas de baja afluencia de personas como campings, parques o polígonos industriales ya no tienen porqué tener las luminarias encendidas al 100% cuando no hay necesidad sin perder la sensación de seguridad. 
Esto se consigue gracias al sistema de telecontrol inteligente ONFIELD de BENITO NOVATILU. Éste permite la creación de grupos de hasta 200 luminarias que interactúan con los vehículos o peatones para reaccionar ante su presencia antes de que lleguen creando así el efecto de “ola de luz adaptativa”, que es determinante para que la iluminación cumpla con una de sus funciones más importantes: la de proporcionar sensación de seguridad. Con este sistema, que además se puede gestionar desde una simple aplicación móvil, en Grupo BENITO NOVATILU ya ha conseguido ahorros en algunas instalaciones en polígonos industriales que llegan hasta el 90% y gastar solo un 10% de lo que se gastaba con las antiguas farolas. Este hecho hace que muchos municipios se planteen incluso el consumo cero, compensando este 10% con la instalación de placas solares en las cubiertas de sus equipamientos